Vierta una cucharada de bicarbonato de sodio en la estufa: la solución a uno de los mayores problemas en la cocina
Hoy en día, la mayoría de las personas se han vuelto conscientes del medio ambiente y han decidido reemplazar los productos domésticos convencionales llenos de productos químicos por productos naturales. Para eliminar la suciedad, limpiar, desodorizar y dar brillo a diversas superficies, ciertos ingredientes son infalibles. Descubra cómo limpiar bandejas para hornear con bicarbonato de sodio y dejarlas limpias como nuevas.
El bicarbonato de sodio es un polvo blanco y fino que está de moda en este momento. Considerado un producto multipropósito, este ingrediente se encuentra entre los detergentes y limpiadores más impresionantes. Algunos lo utilizan para eliminar la cal , desinfectar inodoros o incluso blanquear la ropa. Pero en este artículo te mostramos cómo limpiar tus placas con bicarbonato de sodio para que luzcan como nuevas.
Cómo usar bicarbonato de sodio para limpiar estufas
El bicarbonato de sodio es un poderoso desengrasante que ayuda a eliminar la grasa persistente de las estufas.
Con el tiempo, se ensucian, especialmente si tiendes a olvidarte de tapar las ollas y sartenes mientras cocinas la comida. Por lo tanto, pueden aparecer manchas de suciedad y grasa y ser difíciles de eliminar.
Para limpiar placas eléctricas o placas de gas de acero inoxidable, puedes usar bicarbonato de sodio. En un recipiente, mezcle un litro de agua y una taza de bicarbonato de sodio. Dejar actuar durante 15 minutos y luego, con una esponja húmeda, pulverizar sobre las manchas y frotar las placas para destaparlas. Enjuague las placas de cocción y luego séquelas con un paño seco.
Sin embargo, tenga en cuenta que se recomienda evitar el uso de bicarbonato de sodio para limpiar las placas de cocción de vitrocerámica. Y por una buena razón, la propiedad abrasiva del polvo blanco corre el riesgo de rayar esta superficie o dejar un velo blanco que es difícil de quitar.
¿Cuáles son otros usos del bicarbonato de sodio?
Limpiador, desinfectante o decapante. El bicarbonato de sodio es un polvo económico y conveniente para usar en casa . Aquí hay algunos usos de este polvo que debe conocer:
Blanquear los dientes con bicarbonato de sodio
El bicarbonato de sodio es una excelente pasta de dientes que ayuda a blanquear los dientes de forma natural. Este viejo truco de la abuela da resultados rápidos. Simplemente ponga una pequeña cantidad en su cepillo de dientes y luego agregue pasta de dientes antes de cepillarse. Tus dientes lucirán más blancos que nunca.
Elimina los malos olores de la nevera con bicarbonato de sodio
El bicarbonato de sodio también ayuda a neutralizar los olores en el refrigerador. Para ello, coloca una taza que contenga de 3 a 4 cucharadas de bicarbonato de sodio en tu refrigerador. ¡Los olores desaparecerán mágicamente!
Usar bicarbonato de sodio para limpiar ollas y sartenes quemadas
El bicarbonato de sodio ayuda a descomponer la grasa rebelde y hace que las ollas y sartenes brillen. Mezcla bicarbonato de sodio con un poco de agua para formar una pasta. Luego vierta el producto en la olla o sartén quemada y hierva por unos minutos. Apagar el fuego y dejar enfriar. Finalmente, frote con una esponja o cepillo no abrasivo.
Desinfecte alfombras y moquetas con bicarbonato de sodio
Para desinfectar alfombras y moquetas, puedes espolvorear bicarbonato de sodio encima y luego la tapicería con un cepillo suave. Deje el bicarbonato de sodio toda la noche. Al día siguiente, aspire como de costumbre. Se sorprenderá al descubrir que las manchas y los olores desaparecerán.