Arrancar la grasa de la estufa después de guisar, o de cualquier otro tipo de superficies, puede ser verdaderamente un martirio si no se tiene el producto correcto, y aunque en el mercado podemos encontrar una gran variedad, nada se compara al potente desengrasante casero que hoy te enseñaremos a preparar.

Ya sea porque te tocó guisar para la cena de Navidad y Año Nuevo o por cualquier otro motivo, este desengrasante se convertirá en tu mayor aliado a la hora de limpiar la grasa y mugre más difícil de quitar.

Eso sí, te advertimos que sus componentes en conjunto pueden resultar algo corrosivos para cierto tipo de materiales como la piedra, mármol o madera. Por otra parte, este desengrasante casero debe guardarse en una botella etiquetada y siempre lejos del alcance de los niños.

Finalmente si vas a prepararlo, lo más recomendable es que lo hagas en un espacio abierto ya que tiende a soltar gases que pueden ser dañinos si se inhalan y si entran en contacto con los ojos.

Una vez dicho esto, es hora de ir al paso a paso para que aprendas a prepararlo en casa, y no tengas miedo, verás que resulta muy sencillo hacerlo y además, cuando notes sus resultados, lo amarás por completo. Esto es lo que necesitarás…

desengrasante casero para la estufa

(Foto: Freepik)

Desengrasante casero

  • 1 taza de vinagre blanco
  • 2 litros de agua
  • 4 cucharadas de bicarbonato
  • 1/4 de taza de cloro
  • 1 cubeta
  • 1 pala para revolver
  • Botella con atomizador
  • Embudo
  • Etiquetas blancas
  • Plumón negro
  • Guantes de plástico para hacer la limpieza

Preparación:

Antes de empezar recuerda estar en un lugar abierto y ponerte tus guantes de plástico.

  1. Coloca en la cubeta el vinagre y el agua. Mezcla ambos ingredientes.
  2. Ahora añade el bicarbonato y mezcla todo.
  3. Espera un par de minutos a que la mezcla deje de hacer reacción.
  4. Ahora deberás ir añadiendo el cloro pero poco a poco para evitar que la reacción con los otros ingredientes sea agresiva. En este punto procura voltear la mirada para no inhalar los vapores y que tampoco entren a tus ojos.
  5. Una vez agregado el cloro, mezcla perfectamente todos los ingredientes con ayuda de la pala.
  6. Finalmente con ayuda de un embudo vierte la mezcla en una botella con atomizador y etiquétala para que todos en casa puedan identificar el desengrasante casero.

Como verás prepararlo es sencillo y realmente no corres ningún riesgo siempre y cuando hagas la preparación en un lugar abierto como ya mencionamos.

Para utilizarlo tan solo rocíalo sobre la grasa o mugre, deja que repose 5 minutos y después talla con ayuda de una fibra; no olvides ponerte tus guantes para limpiar. Por último retira la mezcla y mugre con un trapo limpio y húmedo.

¿Te animarás a preparar este desengrasante casero para hacer más fácil la limpieza de tu hogar?

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