• Heidi Rosen es una escritora especializada en diseño de interiores, proyectos de bricolaje y vida sostenible. Le apasiona crear espacios hermosos y funcionales y ayudar a otros a hacer lo mismo.

¿Se te pasó la primavera? No importa—estas flores aman el calor del verano.

¿Pensabas que ya era tarde para comenzar tu jardín de flores? Para nada. Junio puede parecer que llegaste tarde, sobre todo si no sembraste en primavera, pero todavía hay tiempo de sobra para llenar tu espacio con color. De hecho, muchas de las flores más resistentes y vistosas prefieren justamente el calor de principios de verano para crecer bien.

Ya sea que tengas un jardín amplio, unas cuantas macetas en el balcón o solo un rincón soleado, puedes sembrar semillas ahora mismo y disfrutar de sus flores en poco tiempo. Estas nueve variedades crecen rápido, resisten el calor y requieren poco mantenimiento. Además, atraen polinizadores como abejas, mariposas y colibríes, lo que las hace no solo hermosas, sino también útiles para el ecosistema.

No importa si eres principiante o tienes experiencia, estas flores son excelentes opciones para sembrar en junio. Florecerán en el transcurso del verano y, en muchos casos, seguirán hasta bien entrado el otoño. Así que no guardes esos sobres de semillas todavía. Con un poco de sol, tierra y agua, todavía estás a tiempo de tener un jardín lleno de vida.


¿Cómo se siembran estas flores desde semilla?

¿Se pueden sembrar directamente en la tierra?
Sí. Todas las flores de esta lista pueden sembrarse directamente en el suelo o en macetas, sin necesidad de germinar en interior. Solo asegúrate de que la tierra esté suelta y bien drenada antes de sembrar.

¿Qué tan profundo se entierran las semillas?
La mayoría de estas semillas se siembran a poca profundidad, apenas cubriéndolas con una fina capa de tierra (entre 0.5 y 1.5 cm, según el tamaño de la semilla). Consulta el sobre si tienes dudas.

¿Debo remojar las semillas antes?
Algunas como las campanillas germinan mejor si remojas las semillas una noche antes. Las demás pueden sembrarse secas.

¿Cuánto tiempo tardan en brotar?
Germinan rápido—muchas entre 5 y 10 días si el clima es cálido y húmedo.

¿Y después?
Riega con suavidad y frecuencia hasta que veas los primeros brotes. Cuando las plantas tengan unos 5–10 cm, puedes empezar a regar menos seguido. Algunas variedades agradecen un pequeño raleo si germinan muchas juntas.

Con sol, agua y un poco de paciencia, estas flores te recompensarán muy pronto.

Aquí te contamos cuáles sembrar:


1. Zinnias (Zinias)

Las zinnias parecen hechas a la medida del verano. Son anuales que prosperan con calor, sol y suelo bien drenado, incluso si es pobre. Sus flores vienen en todos los colores excepto azul, y crecen rápido: suelen florecer entre 6 y 8 semanas después de sembrarlas. Puedes ponerlas directo en tierra o en macetas a pleno sol. Florecen de forma continua hasta el otoño y son perfectas como flores de corte. También atraen mariposas, por lo que son ideales para jardines de polinizadores. Si quitas las flores marchitas, seguirán floreciendo sin parar.


2. Cosmos

Los cosmos tienen un aspecto delicado, pero son resistentes y fáciles de cuidar. Estas flores altas y aireadas se desarrollan mejor a pleno sol y en suelos pobres—demasiado abono puede dar muchas hojas y pocas flores. Sus pétalos en tonos rosa, blanco y violeta atraen abejas y mariposas. Siembras las semillas directo en tierra y en dos meses ya tendrás flores. Además, se auto-siembran con facilidad y siguen floreciendo si retiras las flores secas. Son ideales para quienes quieren un jardín hermoso con poco esfuerzo.


3. Girasoles

Los girasoles son los reyes del verano. Sus tallos altos y flores amarillas llamativas los hacen destacar en cualquier jardín. Lo mejor: son muy fáciles de sembrar desde semilla. Ponlas directo en tierra con buen drenaje y sol pleno, y en unos días empiezan a germinar. Puedes elegir entre variedades gigantes o tipos más ramificados que dan varias flores. Florecen rápido, en 8 a 10 semanas, y atraen tanto a polinizadores como a aves. A los niños les encanta verlos crecer. Si son muy altos, puedes sujetarlos con una estaca para que no se doblen.


4. Tagetes (o cempasúchil)

Los marigolds son flores resistentes al calor que germinan y florecen rápidamente. Los tipos franceses crecen especialmente rápido y funcionan bien en bordes, macetas o junto a hortalizas. Sus tonos naranjas, amarillos y rojos no solo son llamativos, sino que ayudan a alejar insectos como los pulgones. Prefieren pleno sol y suelos algo secos, por lo que son ideales para veranos calurosos. Siembras las semillas directamente en tierra caliente y en unas 6 semanas ya estarán en flor. Si vas retirando las flores secas, seguirán floreciendo hasta el otoño.


5. Nasturtiums (Capuchinas)

Las capuchinas son plantas alegres que crecen rápido y dan un toque de color inmediato. Sus flores comestibles en tonos naranja, rojo y amarillo, junto con sus hojas de sabor picante, las hacen populares tanto en jardines ornamentales como en huertos. Se siembran directamente en el suelo o en macetas—no les gusta ser trasplantadas. Prefieren suelos pobres y sol directo o parcial. Germinan rápido y en 6 a 8 semanas ya están floreciendo. Se adaptan muy bien a colgar de macetas, cubrir bordes o trepar estructuras pequeñas.


6. Morning Glories (Campanillas)

Las campanillas son trepadoras rápidas con flores en forma de trompeta que se abren cada mañana y se cierran por la tarde. Son ideales para cubrir rejas, barandales o pérgolas. Se siembran directamente en junio, y si remojas las semillas una noche antes, germinan más fácil. Aman el calor y el sol directo, y necesitan un suelo bien drenado. Florecen entre 6 y 8 semanas después de sembrar y atraen colibríes y mariposas. Solo necesitas darles algo por donde trepar y disfrutar de su colorido diario.


7. Alyssum

El alyssum es una planta baja y aromática que se esparce con rapidez y cubre bien el suelo. Sus diminutas flores blancas, rosadas o violetas crecen en racimos densos que llenan los bordes del jardín o caen suavemente desde macetas colgantes. Prefiere sol pleno o sombra parcial, y se desarrolla bien si las noches no son demasiado calurosas—por eso junio es un buen momento para sembrarlo. Esparce las semillas donde quieras que crezca y florecerá en unas 6 semanas. Tolera la sequía, atrae insectos beneficiosos y suele auto-sembrarse para la próxima temporada.


8. Calendula (Caléndula)

La caléndula, también conocida como maravilla, es una flor útil y vistosa con pétalos en tonos naranja y amarillo. Le va bien tanto en climas frescos como cálidos, lo que la hace perfecta para sembrar en junio. Sus pétalos son comestibles y se usan en infusiones, pomadas y cremas naturales. Se siembra directamente en tierra, germina con facilidad y no exige mucho. Con sol, agua regular y algo de mantenimiento, florece durante meses. Es muy fácil de cultivar y muy apreciada en jardines de estilo rústico o medicinales.


9. Cleome (Flor araña)

La cleome es una flor llamativa con pétalos largos que parecen fuegos artificiales. Tiene un porte vertical y elegante que le da estructura a cualquier jardín. Le encanta el sol pleno y el suelo con buen drenaje. Puedes sembrarla directamente en junio y germina rápido con el calor. Crece alto—hasta 1.5 metros—y queda bien en bordes traseros o zonas que quieras destacar. Sus flores atraen polinizadores y duran hasta finales del verano. Aunque se ven delicadas, resisten el calor sin problema. Solo asegúrate de darles espacio y, si hay viento, un poco de soporte.


Pensamientos finales

Aunque se te haya pasado la primavera, aún estás a tiempo de tener un jardín lleno de color. Junio es un mes ideal para sembrar flores de crecimiento rápido que adoran el calor. Las nueve opciones que compartimos aquí son fáciles de cultivar, resistentes y llenan cualquier espacio de vida, ya sea un jardín amplio, una terraza o unas macetas junto a la ventana. Algunas se siembran en el suelo, otras se cuelgan, y varias más se trepan felices si les das una estructura. ¿Lo mejor? Muchas florecen en solo seis u ocho semanas.

No importa si eres principiante o ya llevas años sembrando, lo importante es mantenerlo simple: busca un sitio soleado, usa tierra con buen drenaje y riega de forma constante mientras las semillas germinan. Desde zinnias hasta capuchinas, estas flores no solo resisten el verano, lo disfrutan. Además, muchas de ellas se resiembran solas, lo que significa que podrías tener flores el próximo año sin hacer nada más.

Así que saca los guantes, rescata esos sobres de semillas y dale un toque nuevo a tu jardín este verano. Aún estás a tiempo. De hecho, este puede ser el mejor momento para empezar.