Muchas veces los zapatos nuevos suelen causarnos dolores extremos en los pies ya sea por falta de costumbre a estos o porque el material del que están hechos aún no se ha estirado. En este artículo te enseñaremos algunos trucos que puedes hacer con tus zapatos y acabes de una vez con el dolor.

Truco del hielo:

Es uno de los trucos más conocidos para tratar el zapato que aprieta.

Necesitarás:

  • 2 bolsas con cierre hermético
  • Agua
  • Zapatos de cuero sin estirar.

Como se realiza:

  • Llena las bolsas con agua hasta la mitad.
  • Coloca la bolsa dentro de los zapatos que vas a estirar, es necesario que hagas presión para que entren adecuadamente. Una vez hecho eso llévalas al freezer
  • Deberás dejar los zapatos con las bolsas por 8 horas aproximadamente.
  • Cuando el agua congele se ocupará de expandir el cuero y estirar los zapatos.
  • Cuando los retires del freezer es recomendable dejar las bolsas congeladas dentro del zapato hasta que se derrita para no lastimar ni romper el cuero.

Este truco lo puedes realizar varias veces hasta que el cuero ceda lo suficiente y los zapatos queden a tu medida.

El truco del alcohol:

  • Este truco requiere que humedezcas un poco de algodón con alcohol etílico y agua en partes iguales y lo coloques en la zona que deseas ablandar.
  • Una vez realizado esto déjalo allí haciendo presión durante algunas horas y luego ponlo a secar.

No debes colocar el alcohol directamente sobre el cuero pintado ya que puede decolorarse, este truco no funciona para gamuza.

El truco del calor:

Para este truco debes colocarte unas medias gruesas y aplicar calor con un secador de pelo o algún artefacto que emane calor y que puedas mantener en movimiento, pues el calor tiene la capacidad de estirar el cuerpo y tenerlo puesto podrá ceder hasta la forma de tu pie para así no lastimarte.

Este truco sólo funciona para zapatos que aprieten en los dedos.