El perejil es un ingrediente muy típico que siempre tenemos en la cocina, pero es importante mantenerlo fresco para que lo podamos añadir a nuestros mejores platos.

El perejil es uno de los ingredientes que más se utilizan en la cocina mediterránea. Un ingrediente que además es barato, o de hecho es posible que si vas al mercado a hacer la compra te lo hayan regalado en varias ocasiones, pero ¿cómo conservar el perejil fresco? te lo explicamos a continuación en una guía de pasos de lo más sencilla.

El perejil es una planta o hierba que suele aguantar varios días sin que tengamos que hacer nada más que dejarlo en un vaso o recipiente con agua. Pero al poco tiempo y más si decides meterlo en la nevera, notarás como pierde color y se queda como humedecido y blando, de modo que puedes aplicar alguno de los remedios que te ofrecemos a continuación, con los que vas a poder conservar el perejil fresco sin problema.

Pasos para conservar el perejil fresco

1. Mete el perejil en el congelador: El perejil se puede almacenar en el congelador durante varios meses de modo que al descongelarlo conseguirás que siga fresco. Para ello, puedes elegir almacenar el perejil en el congelador en bolsas o en una lata, en hojas enteras o ya picado y listo para cocinar. Para conservar el perejil en el congelador, recomendamos que el perejil esté completamente seco después del lavado.
2. Guarda el perejil en sal: Otro remedio para conservar el perejil fresco es que lo mezcles con sal que mantendrá todas sus propiedades y evitará que se pudra durante semanas. Para ello, debes aplicar la cantidad correcta de sal que debe ser de aproximadamente 40 gramos por hectogramo de perejil. Además, tienes que lavar y secar bien el perejil, con papel absorbente o dejarlo reposar durante unas horas sobre una toalla de cocina. Luego debes cortar el perejil finamente para permitir que pierda todo el agua. Después del picado, déjalo reposar y vuelve a secar durante unas horas. En un tazón, mezcla el perejil con la sal. Vierte la mezcla en frascos de vidrio esterilizados y sellar. Cierra los frascos y meteros en la nevera o bodega de modo que solo los tengas que sacar cuando decidas usar el perejil que se conservará siempre fresco.
3. Conserva el perejil con bicarbonato: Si tienes la suerte de haber plantado perejil en casa y deseas poder conservarlo fresco, puedes recoger las hojas y preservarlas durante mucho tiempo. Además, debes separar las hojas del tallo, luego echar agua fría y bicarbonato en un tazón pequeño y agregar las hojas de perejil; déjalo todo en remojo durante unos minutos para eliminar cualquier impureza y luego enjuaga varias veces con agua fría. Transferimos las hojas a un recipiente y eliminamos toda el agua. Transferimos el perejil a una bolsa de plástico para la comida y lo colocamos en la nevera. De esta manera el perejil se mantendrá durante 2-3 semanas sin problema.