Los sérums faciales son imprescindibles en cualquier rutina de cuidado de la piel, ya que son capaces no solo de hidratar y preparar la piel para la aplicación de otros productos, sino también de mejorar el aspecto de la piel y eliminar las arrugas y líneas de expresión, rejuveneciendo el rostro.

Un sérum facial es una base hidratante muy ligera que se suele aplicar después del tónico. Contiene una alta concentración de principios activos que hidratan y preparan la piel para que absorba mejor los productos que vamos a aplicar inmediatamente después.

A diferencia de una crema, los sueros faciales son absorbidos más rápido por la piel ya que contienen menos aditivos espesantes, emulsionantes o aceites, lo que les permite penetrar en las capas más profundas de la piel.

La vitamina C es un poderoso antioxidante capaz de proteger las células de la piel contra el daño causado por los radicales libres. Un sérum facial a base de vitamina C que nos permite luchar contra las arrugas y líneas de expresión, y hacer que la piel luzca más radiante.

Ingredientes:

  • ½ cucharada de ácido hialurónico
  • ½ cucharada de vitamina C
  • ½ cucharada de agua destilada
  • una botella de vidrio oscuro con cuentagotas

Verter todos los ingredientes en la botella y agitar bien para que se integren entre sí. Es importante que la botella sea de cristal oscuro para evitar la oxidación de los ingredientes.

Aplique el suero facial de vitamina C todas las noches antes de acostarse.