Prepara estos productos de limpieza caseros con ingredientes asequibles y de consumo diario

Fabrica tus propios productos de limpieza

Los productos de limpieza elaborados en casa son una alternativa segura y natural a las versiones industriales que puedes encontrar en los supermercados, además de ser más económicos y respetuosos con el medioambiente. ¿Cómo puedes fabricar tu propia remesa?

  • Limpiacristales. Mezcla a partes iguales en una botella con pulverizador agua y vinagre blanco. Añade unas gotas de limón y agita la sustancia resultante. Pulveriza sobre los cristales y frota después con papel de periódico para abrillantar.
  • Desinfectante. Vierte agua en un pulverizador y añade de ocho a diez gotas de árbol de té. Agita y deja reposar durante, al menos, 24 horas. Es perfecto para el baño por sus propiedades antibacterianas.
  • Limpiador de hornos. En un bol, mezcla un cuarto de taza de bicarbonato y dos cucharaditas de sal. Agrega media taza de agua y remueve hasta conseguir una masa muy pastosa. Después, frótala sobre las paredes del horno, deja que actúe unos minutos y retira el producto.
  • Desengrasante. Combina un litro de agua caliente con dos cucharadas de jabón neutro, una cucharada de bicarbonato de sodio, un chorro de vinagre blanco y la cáscara de un limón. Antes de usarlo, deja que los ingredientes se integren durante unos minutos.
  • Lavaplatos. En este caso, basta con tres cucharadas de jabón blanco rallado, tres litros de agua, media taza de vinagre y el zumo de un limón.
Limpieza del hogar

Más trucos de hogar útiles y fáciles

El limón es bueno contra los restos de cal

Uno de los problemas principales de suciedad en los grifos son las aguas duras que dejan manchas de cal. Se pueden eliminar utilizando medio limón o aplicando vinagre con un algodón o un trapo. Simplemente tienes que frotar las zonas manchadas y persistir en las que haya más acumulación de cal.

Si lavas a mano, aplica así el suavizante

Si lavas la ropa a mano, también tienes que usar suavizante. En este caso, se aplica tras el aclarado del jabón. Es decir, realiza el lavado a mano habitual y aclara la prenda. Después, introdúcela de nuevo en agua con suavizante. Enjuaga, escurre y deja que se seque. Es importante que sepas que el suavizante por sí solo no necesita aclarado.

Radiadores limpios antes de encenderlos

Al acumular mucho polvo, se convierte en una obligación limpiar los radiadores antes de encenderlos. Si están muy sucios, debes quitar el polvo con el aspirador. Después introduce un plumero en el interior y humedece un trapo con agua tibia y jabón líquido. Cuando esté bien escurrido, limpia el exterior del radiador y sécalo inmediatamente.

Limpia los cristales como un profesional

Para que tus ventanas luzcan impecables, puedes hacer tu propio kit de cristalero formado por una regleta, una esponja, una bayeta de microfibra, un pulverizador y jabón de lavavajillas. Primero moja la esponja en agua y unas gotas de detergente, escurre y empapa el cristal. Con la regleta retira el agua sobrante y con el trapo debes ir secando poco a poco. Si quieres que queden perfectos, límpialos mejor en un día nublado que soleado.