Para el horno, para teñir el pelo, para conservar alimentos… los usos del papel de aluminio son múltiples y hay uno que desconocías: protegen nuestra ropa en cada lavado y evitan que se electrifiquen.

Al lavar la ropa en la lavadora se desprende cierta cantidad de cargas eléctricas que dañan las prendas y desgastan los tejidos pudiendo producirse incluso roturas. Estas cargas eléctricas pueden provenir de la propia lavadora o del roce de las prendas durante el lavado, lo que puede llegar a provocar una electrificación en los tejidos, que en muchas ocasiones suele resultar molesto y antiestético.

Si introducimos bolitas de papel de aluminio en cada lavado conseguiremos que este absorba toda la energía eléctrica evitando que las prendas se dañen o se electrifiquen.

Para ello, simplemente debes introducir tres bolas de papel de aluminio del tamaño similar a una pelota de golf y seguir los pasos habituales de cada colada, con el detergente y programa que utilices normalmente.

En el caso de que las prendas que estás lavando suelan adquirir mucha electricidad, recuerda la importancia de utilizar el suavizante en este tipo de lavados, así como un programa corto de centrifugado para no aumentar este problema.

En la secadora es donde mayor electricidad estática se acumula, ya que cuanto más se roce la ropa entre sí estando seca, mayor carga se generará. En este sentido, existe papel para la secadora, pero si lo has olvidado, puedes introducir también aquí las tres bolas de papel de aluminio para evitar que se acumule electricidad.

Las bolas podrás utilizarlas durante 6 meses aproximadamente. Además, es importante destacar que el papel de aluminio no es nocivo para la salud ni tampoco provocará daños en la ropa, lavadora o secadora, todo lo contrario.

¿De qué está compuesto el papel de aluminio?

El aluminio es un elemento químico que se extrae de un material llamado bauxita. Se trata de un metal no ferromagnético, es decir, que no tiene los compuestos necesarios para magnetizarse con facilidad. El papel de aluminio se consigue gracias al equilibrio de hierro y silicona, junto al 98,5% de aluminio. Además, la hoja de este metal es muy flexible y es un gran conductor del calor.

Otros usos del papel de aluminio

Además de los que ya hemos mencionado, el papel de aluminio puede ayudarnos a eliminar ciertas manchas difíciles, afilar las tijeras o limpiar la plancha, entre otros.